Discurso Personas Distinguidas 2010

En el curso de la vida los acontecimientos se desencadenan uno tras otro generando un proceso de desarrollo personal y social, este proceso a veces se transforma en rutina y otras en hitos. La construcción de la historia de las personas implica una referencia necesaria a estos hitos, así recordamos nuestro nacimiento, nuestra primera comunión, nuestra graduación de enseñanza media, el día del matrimonio, el nacimiento de los hijos, la entrega del título … etc. Lo mismo sucede con las ciudades, su historia no se reconoce sobre la base de su quehacer rutinario, sino sobre el rescate de ciertos momentos que se valoran o estiman relevantes, es así como recordamos el día de la fundación, las batallas gloriosas de la independencia, la construcción de nuestros edificios emblemáticos, el Ferrocarril Trasandino, por ejemplo. Sin embargo, la historia de los pueblos se encuentra íntimamente vinculada con sus ciudadanos, la historia de los pueblos es la historia de sus ciudadanos.

Por eso hoy estamos aquí, porque hoy estamos haciendo historia, hoy reconocemos a aquellos vecinos y vecinas, también a aquellas instituciones, todos quienes han sido articuladores del desarrollo de nuestra ciudad, a aquellos que han destacado por su solidaridad, su liderazgo, su compromiso, su profesionalismo, su esfuerzo. Con seguridad somos injustos, no están todos los que deben estar, es nuestra naturaleza humana, pero en el silencio a quienes hoy hemos omitido y a viva voz a quienes hoy reconocemos, como ciudad les decimos gracias.

Entre Uds. se encuentran profesionales, folcloristas, empresarios, trabajadores, pensionados, estudiantes, dirigentes, ecologistas, también organizaciones culturales, deportivas y religiosas, todos entregando lo mejor de sí por esta su querida ciudad.

Mención especial merecen en este año 2010 aquellos que, sin pensar en sí, mirando el sufrimiento de nuestros compatriotas víctimas del terremoto, sus dificultades de alimentación, abrigo, habitación y principalmente apoyo moral y espiritual, tuvieron la valentía de salir de si mismos y con generosidad donar su esfuerzo y trabajo, sus bienes, su tiempo, para ir en su ayuda, no pudimos premiarlos a todos personalmente, eran cientos, quizá miles, pero lo hacemos en algunos de Uds. o en instituciones, en su representación.

Este reconocimiento es estímulo para todos nosotros, estímulo para profundizar el compromiso con esta ciudad y esta patria, para avanzar aún más fuerte en su desarrollo. Andinos destacados, ciudadanos distinguidos, amigos y amigas, muchas gracias.